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Datos oficiales indican que existe un déficit de unas 600.000 instalaciones a lo que se une el que unos 8,5 de cada 10 edificios necesitan reparaciones. De igual manera señalan que el costo de construcción de una vivienda oscila entre 6 y 8 mil dólares, mientras que la rehabilitación de otra no sobrepasa los 1,000 dólares.
Para facilitar el problema de la construcción de casas, en el 2010 el Instituto Nacional de la Vivienda planteó la concesión de licencias de construcción, liberó la venta de materiales a la ciudadanía, amplió el plan de créditos y subsidios para reparar conservar y construir por esfuerzo propio.
Pero más allá de lo que el gobierno cubano ha propuesto como solución, la realidad que enfrentan los cubanos muestra otra cara del problema según ha dicho a martinoticias.com el bayamés Yoandry Gutiérrez, quien comenzó a construir su casa en 1980 y aunque no la ha terminado reconoce que ‘ya necesita reparaciones”.
En los puntos de venta estatales el cemento cuesta entre 80 y 100 pesos cubanos según el tamaño de la bolsa, las cabillas a 15 pesos el metro y las losas para pisos a 7 pesos cada unidad. Las instalaciones de barro para plomería pueden estar entre 50-60 pesos la unidad y las ventanas de aluminio a 600 pesos cada una.
Según el joven una taza sanitaria en la shopping cuesta 67 CUC y las demás instalaciones de la cocina como losetas, llaves de agua y fregaderos sólo se consiguen en las tiendas por divisas.
Tanto en Bayamo como en Guantánamo la arena para fabricar se le compra a la gente que por cuenta propia la saca de los ríos en los alrededores de las ciudades y la vende a 200 pesos el metro.
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