Desde una suite Five Stars de un hotel madrileño bien alejado del marabu y de las miserias de la vida diaria en Cuba; Osvaldo, el unico tipo en Cuba que fue ministro por un mes y que no resistio las presiones y volvio a su recinto de "portavoz teorico", emplea un tono mas sugerente y menos ortodoxo que en sus anteriores apariciones publicas y devela algunas de las coordenadas de la reforma economia raulista.
Es política del Gobierno:
- eliminar la dualidad monetaria, que de alguna manera dañó la autoestima nacional, pero necesitamos un mínimo de reservas monetarias para ir a una tasa de cambio normal
- una reforma de los precios y los salarios y una eficiencia económica mayor
- la factibilidad de esas reformas es posible por la evolucion de la economia hacia una estabilizacion gracias en buena medida, al suministro petrolero de la Venezuela de Hugo Chávez y a los acuerdos comerciales con China
- las medidas que se implementan responden a las realidades específicas de la economía cubana
- no nos debe preocupar que quien produzca más gane más. Y en todo caso, si eso adquiere ciertos extremos, la política impositiva puede corregir esas dificultades
- los salarios es uno de los temas peor tratados por las informaciones periodísticas sobre Cuba
- capital extranjero: ya lo anuncio Raúl Castro, pero están pendientes las normas de ese proceso
- principales fuentes de ingresos de Cuba: exportación de los servicios médicos, la venta de níquel y el turismo. Más de 20.000 médicos cubanos trabajan en una decena de países, principalmente en Venezuela, que paga con petróleo
- supermercado privado en Cuba: a los cubanos no les interesa si es privado o no, sino que haya una buena oferta, un buen surtido, y eso puede conseguirlo el Estado.
Y he aqui el pollo del arroz con pollo de la concepcion raulista de las reformas: "Pan y Circo" y palos cada vez que sean necesarios.