Sismómetro — Este dispositivo podía detectar terremotos tan distantes que nadie cercano los sentía siquiera. Era un dispositivo en forma de jarrón con varias cabezas en bronce de dragones, cada una con una bola de bronce en su boca; alrededor del pie tenía varios sapos de bronce con las bocas abiertas. Si la máquina detectaba un temblor de tierra las bolas de bronce se soltaban y caían en la boca de los sapos, provocando un ruido a modo de alarma. La dirección de la cual procedía el temblor quedaba indicada según la bola que había caído.
Fotografía (cc) Kowloonese
# Enlace Permanente