El Sr. Salvador Valdes Mesa, designado a dedo miembro del Buro Politico y Camajan Mayor de la Central de Trabajadores de Cuba, esta muy activo en estos dias.
[En la foto el Tracatan con su jefes]
Haciendo honor a que el sindicato es una de las ¨correas de transmision¨ entre el poder central y los trabajadores, Valdes Mesa sin preguntar la opinion a los afiliados a los distintos sindicatos, anda pregonando la necesidad de eliminar el subsidio estatal a los trabajadores que queden cesantes y a los cuales se le ofrecera trabajar en los sectores ¨priorizados¨ de la agricultura y la construccion.
"Nadie va a quedar desamparado, pero no podemos continuar haciendo las cosas como hasta ahora, habrá a quien no le guste la nueva propuesta de empleo, pero el Estado no puede continuar subsidiando a trabajadores que queden disponibles", expreso tranquilamente el Sr. Valdés, mas preocupado por defender su puesto de trabajo que el de los que tiene el deber de defender contra las ignomias gubernamentales.
Nadie quedara desamparado, pero el que no vaya para donde lo manden como un esclavo no recibira ingresos. Todos los paises del mundo racionales, tienen seguros contra desempleo, en Canada por ejemplo es de 9 meses y si en eso tiempo el trabajador no ha encontrado un nuevo puesto de trabajo puede aplicar para otros sistemas de seguridad social.
En Cuba sin embargo, donde una de las consignas ha sido el ¨pleno empleo¨ reportando cifras de desempleados por debajo del 2% que nadie cree [exactamente 1.7% en el 2009], pero que ellos se la toman muy en serio en su campana propagandista, la misma esconde la alta cifra de ¨plantillas infladas¨ [personal sobrante en las entidades], personal en cursos de superacion y/o recalificacion infinita como los obreros azucareros y los cesantes.
Con este otro acto voluntarista en la conduccion de las reformas economicas, el Castrismo comete varios errores estrategicos.
En una situacion de recesion y crisis como la que experimenta la economia del pais, es razonable que se estimule la reinsercion laboral de las personas que han perdido su trabajo, pero para ello no es necesario OBLIGARLAS a trabajar en los puestos de trabajo que el gobierno considera.
Es totalitarismo, es esclavismo, es inmoral, economicamente irracional y socialmente desestabilizador.
La medida sensata es estimular el flujo de los desocupados hacia las actividades priorizadas sobre la base no de la coercion, sino del beneficio economico de los mismos, es decir del beneficio economico mutuo del estado y el trabajador.
Las personas en esa posicion tendra dos opciones, o van a trabajar a la construccion o la agricultura donde volveran a hacer como que trabajan, mientras el estado hace como que les paga, o sencillamente permanecer en casa ingresando al mercado informal.
En su concepcion voluntarista y autoritaria de las reformas economicas, el Castrismo se inclina por la represion economica y social, porque les tiene que quedar claro que la minoria de las personas en esa situacion no apoyaran la medida y se suman a la larga lista de los inconformes y potencialmente conflictivos ciudadanos.