Por Andrés Pascual
A Pacquiao le regalaron la pelea
Nacionalismos, regionalismos, “lo políticamente correcto”…todo influye en la impresión, no que se tenga de algo, sino que se quiera imponer, que es otra cosa.
El cronista americano, tan temeroso de reacciones que puedan desembocar en la peligrosa demanda, utiliza una palabra para encubrir el despojo en el boxeo: controversial. Lo políticamente correcto es suprimir la palabra robo porque, por hipocresía o por dinero, no es “políticamente correcto”; es decir, saludable para su estabilidad profesional. Los cronistas cubanos de antes, mejores que los de ahora incluso en inglés, ante un despojo meridiano, utilizaban la palabra maldita y le colocaban como adjetivo otro que es autoprohibido escribir hoy: descarado.
El sábado pasado el mundo del boxeo presenció un acontecimiento interesante en la estelar de Las Vegas: el PACMAN se les olvidó en el camerino a Bob Arum, a Freddie Roach y a Top Rank y subió otro, que pudiera definirse como THE REAL MANNY, el gran boxeador de los plumas, muy bueno, pero humano.
Sin velocidad supermánica, sin aire para 3 meses (en el segundo respiraba por la boca), sin la pegada de Joe Louis, con los problemas de coordinación en la ofensiva y la defensa que el el Trainer del Año, ¡Tres veces! nunca ha sabido o no ha podido corregir, quedándose abierto en el ataque e invitando al contragolpeo con seguridad y eficiencia…Anoche se pudo ver a un Senador con el escaño en peligro, como esos políticos que mienten y, a la larga, se quedan sin justificaciones.
¿Quién puede tener hoy ni la mínima posibilidad de razón si considera que el hombre al que le regalaron la decisión el sábado contra Juan Manuel Márquez, está en capacidad de ganarle a ninguna de las víctimas que se prestaron como escalones para llevarlo a un trono tan malhabido como la pelea que le dieron en el MGM Grand?
Desde Ricky Hatton hasta Antonio Margarito, todos lo noquean si encuentran en frente a este filipino, que se frustró y perdió ante un peleador que es ligeramente superior a él.
Una vez que se conoce cómo dispuso Floyd Mayweathers jr de Juan M Márquez, ¿Todavía le quedan dudas a alguien de qué le sucedería al REAL MANNY si se les ocurre a sus apoderados subirlo contra el Niño Feísimo?
Son detalles y detallistas, yo simpatizo con Márquez no porque sea hispano ni marciano, que no tengo complejos adicionales, sino porque, a mi modo de ver, a sus 38 años, todavía es tan goloso como el joven que comienza en Fistiana, por lo que tiene metas por cumplir consigo mismo y con su público.
Algún cronista escribió que, quizás porque Pacquiao llevó la intención ofensiva y el azteca se dedicó a contragolpear, pues le haya costado la pelea al verdadero ganador; sin embargo, además de ser una calumnia de principiante, en otras oportunidades nadie ha mencionado esto como factor influyente en los magistrados inquisidores.
Márquez ganó 8 rounds y, hasta donde yo sé, ocho es más que cuatro hasta en la matemática de bodega: golpeó más, con más poder, con más puntería y seguro de que el hombre que tenía enfrente era, si no ligeramente inferior, por lo menos igual que él.
Lo que hicieron contra Márquez el sábado fue un crimen, ya no vale ni comentar el asunto; sencillamente, el Departamento Deportivo de HBO y Top Rank volvieron a proteger los huevos de oro de una gallina que, por lo menos contra Márquez en este pleito, se quedo clueca y sin plumas.
Tal vez quieran la Márquez-Pacquiao IV, a fin de cuentas, quedan muy pocos boxeadores dignos del nivel estelarista y estos han demostrado ser dos de ellos.
Hoy, de lo que no pueden quedar dudas, es de que los mejores libra por libra del boxeo responden al nombre de Maravilla, Mayweathers jr y…Juan Manuel Márquez; como quiera que paguen a la prensa y a los magistrados los interesados en seguir hundiendo al boxeo con este tipo de fallo judicial.