Markus Wolf/ www.economist.com |
Jorge L.García Vázquez
Berlín
(Artículo publicado por el autor en diciembre de 2006 en la Revista Misceláneas de Cuba/Suecia)
Berlín.
Hace algunos días fue sepultado en Berlín el General Markus Wolf, jefe
del espionaje de Alemania Oriental hasta el año 1986.
Su
entierro fue un desfile de antiguos "compañeros de la Stasi, KGB y un
escurridizo agente de la Dirección de Inteligencia cubana, que intentaba
pasar diplomáticamente de incógnito"
Huyó en 1990 a Austria, donde le fue negado asilo político. Salió a
su otra patria: Rusia y regresó a Alemania. Fue condenado en dos
ocasiones, escribió varios libros, entre ellos, uno sobre los secretos de la sabrosa cocina rusa y finalmente terminó sus días
dando conferencias, basadas en lo que aprendió y enseño durante casi cuatro
décadas: la desinformación.
La labor de sus agentes creó el mito del "hombre sin rostro"", el "súper -jefe de agentes secretos".
La labor de sus agentes creó el mito del "hombre sin rostro"", el "súper -jefe de agentes secretos".
Dos
de sus grandes fracasos políticos: haber provocado la renuncia del
canciller alemán Willy Brandt cuando su secretario personal fue
detenido y declaró ser un espía de la Stasi y el otro haber intentado,
en noviembre del 89, persuadir al pueblo
alemán germano-oriental para que continuara viviendo en la RDA, pero bajo un "socialismo reformado".
Fue un fiel asesor de los servicios secretos cubanos y nicaragüenses, los
cuales fueron entrenados, por la
Stasi y pudo ser finalmente identificado por el agente Werner Stiller en 1976.
Pero
el participante que más llamó la atención fue el Embajador de
Rusia en Alemania, Sr. Vladimir Kotenev, el cual tuvo palabras de elogio
que no corresponden a las funciones diplomáticas. Pero bueno el
presidente ruso también se llama Vladimir y no es nada diplomático y,
ahí está
" fuerte, con la mano de hierro "como le corresponde a un (ex oficial
de la KGB) un Vladimir ruso, obstruyendo el difícil camino de la democracia.
El Señor Kotenev expresó que "Alemania pierde en Markus Wolf a uno de
sus más significantes hijos y Rusia a uno de sus mejores amigos.......que
continuará viviendo en nuestros corazones".
Concluyó la ceremonia con la melodía "La canción del pequeño trompetista" (entonada ya en Cuba por miembros de una delegación de la
Stasi en abril de 1970,durante una reunión donde participaron el entonces Ministro del Interior Sergio del
Valle, Manuel Piñeiro y Méndez Cominche, jefe del
espionaje en aquella época.
Terminó
el Sr. Embajador con un proverbio ruso: "
los que mueren mientras duermen tienen un corazón limpio". El General
Wolf falleció durante la noche del 9 de Noviembre de 2006, aniversario
del derrumbe del Muro de Berlín. Pero dejemos descansar al General.La Historia tendrá la última palabra.
Mirando ahora a Rusia: Creo que no hacen falta más palabras. El mensaje del embajador ruso es claro. El discurso fue aprobado en el Kremlin.
Frases como estas, en los momentos por los que está pasando este ex-imperio comunista, que suspira entre el creciente nacionalismo, corrupción y el autoritarismo es un aviso para Europa y el mundo.
Por
el momento, recomiendo a los opositores cubanos no pasar por el
territorio ruso, especialmente después del nuevo acercamiento
político-militar entre Moscú y La Habana.
Mientras tanto las canciones soviéticas se vuelven a escuchar en el Buró Político y en el Comité Central(a Diaz Canel no le agradan estos ritmos. Me han dicho que le gusta el Jazz):
"Por los Valles y Montañas marchó la División" , con ritmo Conga-Profionov,"La Canción de los Estudiantes",Rumba-Chá-Chá-Chá o aquella melodía soviética con sabor cubano "Si Mañana comienza la Guerra", un Chá-Swing, experimento musical, instrumental grabado por músicos soviéticos y cubanos, allá por los años sesenta del siglo pasado, en plena "Guerra Fría".Esta debe ser la canción favorita de Miguel Barnet y Abel Prieto, pero con el acompañamiento vocal de Raúl Castro, Maduro, Vladimir Putin y Barack Obama. Le gustan estas melodias a Hillary Clinton?O habrá un nuevo Musical?
Mientras tanto las canciones soviéticas se vuelven a escuchar en el Buró Político y en el Comité Central(a Diaz Canel no le agradan estos ritmos. Me han dicho que le gusta el Jazz):
"Por los Valles y Montañas marchó la División" , con ritmo Conga-Profionov,"La Canción de los Estudiantes",Rumba-Chá-Chá-Chá o aquella melodía soviética con sabor cubano "Si Mañana comienza la Guerra", un Chá-Swing, experimento musical, instrumental grabado por músicos soviéticos y cubanos, allá por los años sesenta del siglo pasado, en plena "Guerra Fría".Esta debe ser la canción favorita de Miguel Barnet y Abel Prieto, pero con el acompañamiento vocal de Raúl Castro, Maduro, Vladimir Putin y Barack Obama. Le gustan estas melodias a Hillary Clinton?O habrá un nuevo Musical?
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