Carlos Velazco y Elizabeth Mirabal. (CONEXOS.ORG) |
Carlos Velazco, jefe de redacción de la revista oficial Unión, habría renunciado por un nuevo escándalo de censura, informaron fuentes conocedoras del caso.
El detonante fue la publicación del artículo "Los lindes de la obra literaria", del escritor exiliado Vicente Echerri, antes aparecido en DIARIO DE CUBA.
Las fuentes consultadas aseguran que la presentación del número 83,
en la que iba a participar Graziella Pogolotti, fue suspendida. Se
desconoce si la revista, editada por la Unión de Escritores y Artistas
de Cuba (UNEAC), continuará distribuyéndose. Algunos ejemplares ya
habían circulado.
Como responsable del escándalo se señala directamente al vocero
oficial Pedro de la Hoz, nombrado hace poco vicepresidente de la UNEAC.
"Quería revisar personalmente los números de Unión antes de entrar en imprenta, para dar su aprobación o echarlos para atrás", dijo una de las fuentes.
Carlos Velazco es autor, junto a Elizabeth Mirabal, de los libros Sobre los pasos del cronista. El quehacer intelectual de Guillermo Cabrera Infante en Cuba hasta 1965 y Buscando a Caín. Recientemente ambos publicaron una entrevista en DDC.
Echerri: 'Era un texto literario, no político'
Desde Nueva York, Vicente Echerri dijo que su texto era literario, y
no político. Su ensayo estaba anunciado en la portada de la revista.
"No tuve ninguna objeción en que se publicara en Unión, porque mis lectores naturales siguen en Cuba, a pesar de mis 34 años de exilio", afirmó el escritor en declaraciones a DDC.
Echerri aclara que su "animadversión por el régimen no tiene
fisuras", ni él hace "concesiones" políticas. "Pero, fuera de esto, no
tengo problemas cuando tengo que escribir de otros temas. No me
autocensuro".
Los problemas en Unión se suceden uno tras otro en los últimos tiempos.
El primer gran escándalo se produjo con el número 69, que incluyó
poemas eróticos de Aretino, traducidos por Jesús David Curbelo.
Una fuente reveló que Esteban Lazo, ahora presidente de la Asamblea Nacional, pidió responsabilidades.
Nancy Morejón, directora de la revista, las eludió porque "estaba de
viaje y no había revisado el número". Uno de los editores fue cesado.
El número 82 también resultó explosivo por la publicación de un
fragmento de las memorias de Natalia Bolívar, en el cual arremete contra
Marta Arjona y Carlos Rafael Rodríguez.
Según otra fuente, Unión estaba preparando un dossier sobre
"la nueva historia crítica y la historia oficial", con trabajos de
Alejandro de la Fuente, Lillian Guerra y otros autores radicados en el
exterior.
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