domingo, abril 15, 2012

Boxeo - Continua la rutina con el robo a Richard Abril


Richard Abril [d] con su entrenador Osmiris Fernandez
Por Andrés Pascual

       No es posible que un boxeador no haga el peso para una pelea en la división ligera, que suba con 15 ó 16 libra más como superwelter y, aún así, los magistrados estén preparados para darle las ventajas que necesite, como la decisión, que no pudo ganar en el ring porque no sabe boxear.
       Richard Abril pega poco y su boxeo no es todo lo atractivo que exige la clientela que conoce, sin embargo, ganó la mayoría de los rounds de la pelea contra Brandon Ríos, que no supo qué hacer para encontrar a un hombre que se le escapaba del radio de acción, como la pelea de control y, la mayoría de las veces, le marcaba puntos con facilidad.
       El no fue una gran pelea, y  en esto tuvo mucho que ver el interés por meter la cabeza del americano, que obligaba al cubano a aguantar y abrazar para neutralizarlo.
       Fue otro robo facturado en las oficinas del “abogado neoyorquino que manda en Fistiana”.
       La realidad es que cansa desde hace rato ver cómo le levantan el brazo a un perdedor con tanta frecuencia y que no pase nada.
       Ni cuando Palermo y Carbo, Cosa Nostra de verdad, se producían tantos despojos  tan a menudo.
       A pesar de la diferencia de peso en el ring, Abril ganó 10 rounds con otro tablas y el que sobra para Ríos, el criollo se impuso de punta a cabo; es decir, de “huevo clueco y salchichón”. La esquina del cubano, Osmiris Fernández, trabajó con inteligencia y precisión y también hay que hablar de esto, que esa demostración de Abril no fue huérfana ni fortuita.
       Lo que hay contra los cubanos es una conspiración que, a estas alturas, nadie sabe si se establece entre Arum y los jueces, o entre los socios del judío dentro de la tiranía castrista y el propio tipo con el objetivo de desilusionar a los boxeadores, que sienten que se les acaba el tiempo sin pelear o que, cuando les dan un chance, es para robarlos sin misericordia, como le sucedió antes a Lara y anoche a Richard Abril.
       Con los boxeadores que escapan de aquel infierno, por lo seguido que les suceden cosas, hay que pensarlo todo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario