Al poco de llegar a España tras salir de prisión, Víctor Rolando se quedó «impactado» al ver en la Puerta del Sol cómo un grupo de personas «protestaba sin riesgos» contra el régimen castrista. Todavía hoy observa incrédulo por televisión cuando «el Gobierno de Zapatero responde sin brutalidad a las críticas de la oposición». De integridad y valentía probadas para sus compatriotas, Víctor Rolando Arroyo, ex prisionero de conciencia, licenciado en Geografía, nacido en Pinar del Río hace 60 años, fue encarcelado en tres ocasiones por disentir de la dictadura. La última entre la Primavera Negra de 2003 y el 7 de septiembre de 2010, fecha en que aterrizó en España después del compromiso de Raúl Castro de excarcelar a los 52 presos políticos de esa oleada represiva —los últimos del «Grupo de los 75»—, en un diálogo inédito con la Iglesia católica cubana que acompaña el Gobierno español. La condición del menor de los dictadores fue cambiar la celda por el exilio forzado. La mala salud de varios familiares, gran parte secuela del hostigamiento del régimen comunista, pesó a la hora de tomar la decisión.
Continuar leyendo Aqui
No hay comentarios:
Publicar un comentario