martes, diciembre 11, 2007

El pueblo habló. Le toca ahora a la dirección del Partido y el Gobierno

Carlos C. Diaz, un ingeniero electrico residente en Cuba y con acceso a Internet y a Kaos en la red, publica un articulo en esa publicacion donde "presiona" a la direccion del Partido y el Gobierno cubano a tomar las medidas necesarias para salvar a la Revolucion y al Socialismo.

Aunque sorprende el nivel de informacion -incluso a nivel teorico-conceptual, aunque con algunos errores mecanograficos- que maneja el ingeniero Diaz, informacion que no esta accesible al cubano comun por muy ingeniero que alquien sea, pues la misma esta reservada para el uso exclusivo de la Nomenklatura a determinadas instancias, lo mas importante de su articulo radica no en el contenido que todos conocemos ampliamente, sino en el titulo en si mismo: "El pueblo habló. Le toca ahora a la dirección del Partido y el Gobierno"

Se aprecia un incremento en el nivel de exigencias de los articulistas cubanos en Kaos, rozando algunos la actitud contestaria.

Y aunque el Ing. Diaz no lo sepa, no lo comprenda aun o acaso no considere conveniente exponerlo al menos por ahora, la aplicacion de las simples medidas reseñadas en su trabajo derivadas de los planteamientos realizados mediaticamente por la poblacion, conducirian al suicidio politico de Raul Castro y del Castrismo en tanto sistema de dominacion politico e ideologico de la sociedad cubana. Es por ello estimado ingeniero, que la direccion del Partido y el Gobierno, es decir Fidel y el Sucesor Designado en Jefe con su grupo estan incapacitados de realizarlas.

Articulo completo del Ing. Diaz.-

El pueblo habló. Le toca ahora a la dirección del Partido y el Gobierno. No existe ninguna prioridad mayor en Cuba, que salvar el Socialismo, si ello es así, entonces tenemos que asumir el riesgo de actuar, antes de que sea demasiado tarde. Carlos C. Díaz. (Para Kaos en la Red) [10.12.2007 23:40] - 192 lecturas - 4 comentarios

“...los Romanos hacían en estos casos lo que todo príncipe sabio debe hacer: no preocuparse solo de los desórdenes del presente, sino también de los del futuro, y evitarlos por todos los medios; porque cuando los males se prevén con antelación es fácil ponerles remedio, pero si se espera hasta que están cerca, la medicina ya no surte efecto, porque la enfermedad se ha vuelto incurable.”
Nicolás Maquiavelo, “El Príncipe”.

1.- Durante el reciente proceso de discusión y democracia en Cuba, se pusieron de manifiesto casi todas las concepciones y los estados de ánimos que cohabitan en la sociedad cubana.
El pueblo y los revolucionarios más comprometidos, informados y concientes, respondieron al llamado con pasión y convicción revolucionaria, seguro que, o arreglamos nosotros mismos nuestros problemas o lo hará el enemigo, ya sabemos cómo.
El escepticismo, la desilusión y el desencanto estuvieron presentes; también, los que creen que la gratitud y la fe están en contradicción con la critica revolucionaria a favor de salvar la revolución y al pueblo; los que creen que esto se resuelve solo con ética, conciencia y disciplina, otros recurrieron al viejo recurso de acusar de contrarrevolucionarios, trotskistas, utópicos, o “raritos” a los que se atrevierona decir lo que piensan.
No en menos medida, litigó la teoría del tuerto: “esto esta mal, pero peor… los otros”. También los ascetas, los que desean resistir “hasta el ultimo de… los trabajadores cubanos”; a los que ningún sacrificio les parece poco…si es de los otros.
De vez en cuando, tomó palabra la sibilina lengua de algunos miopes que hicieron publica sus manquedades, tratando de desacreditar las voces que ha total riesgo alertaron sobre desvíos, demoras y peligros

2.- En el debate salió a relucir una exhaustiva relaciónde insuficienciasy deficiencias.
Los bajos salarios, los altos precios, la doble moneda, los desastres en la producción agrícola, pesquera y ganadera, las ineficiencias dela industria alimenticia y ligera y los servicios, las serias carencias actuales en transporte, vivienda y alimentación ,de la salud pública y la educación.
Fue muy criticado cierto desequilibrio entre los deberes y derechos en la legislación cubana. No se observan con simpatía algunas acciones del orden interior, que se consideran desvíos de su cometido principal.
Asimismo se identificaron indicios de discriminación racial y nepotismo en el área de la economía emergente y los medios.
Se criticó además, la tendencia a suplir la falta de previsión y organizaciónmediante el sacrificio de la fuerza laboral, cuestionándose severamente las políticas espasmódicas y la falta de constancia para mantener lo ya logrado.
Una encuesta previa, de la prestigiosa y reconocida revista Bohemia, realizada a todo lo largo del país a una muestra de 219 personas, en 11 provincias,-no concluyente, ni total,pero indicativa al menos- fortalece esta apreciación al revelar que eran acuciantes, para los cubanos, los siguientes problemas: dificultades en el transporte, altos precios de productos y servicios, problemas de vivienda, afectaciones en el servicio de salud, limitaciones oferta de alimentos, insuficiencia salarios y pensiones, inestable abasto de agua, insuficiencias del sistema educacional, poca calidad de la gastronomía y el comercio, poca oferta de recreación, problemas con tarifas eléctricas, corrupción e ilegalidades, recursos y pagos a los agricultores. /Revista Bohemia/ En la economía no hay Milagros 6/07/07. Año 99. Numero 14/.pagina 30-33)

3.-Raíces y causas esenciales.
Sin desconocer la influencia notable del bloqueo y la guerra económica se ha consolidado la percepción de que también hay serias causas internas, las principales son:
La excesiva centralización y burocratización, la persistente corrupción, la obsolencia de medidas que debieron ser oportunamente revisadas, las políticasy los enfoques faltos de sentido común en la toma de muchas decisiones; las múltiples regulaciones e inadecuadas políticas prohibitivas.
Las frecuentes acciones contrarias a la legalidad y la Constitución; la multiplicación de los órganos de control sobre los productivos, que no logran su cometido y desvían recursos, la falta de participación real de los trabajadores en la toma de decisiones, la falta de poder real del Poder Popular portener poca autoridad sobre los ministerios y sus dependencias a nivel de basey ser administrador insuficientede los recursos del pueblo.
La deficiente conciencia jurídica en nuestros organismos y en la propia población. Las múltiples omisiones éticas y el insuficiente respeto por la dignidady los derechos personales en algunas instancias.
Según señaló el compañero Pedro Campos, en su apreciación sobre este proceso, la cual comparto: “Los comunistas de base y los trabajadores con absoluta claridad identificaron sus soluciones en los marcos de una sociedad socialista. ... No hubo ninguna sugerencia que pudiera identificarse con medidas de tipo capitalistas o privatizadora…No se cuestionó el socialismo, sino la forma de hacerlo”.

4.- Entre las medidas más demandadas por la militancia y el pueblo, Campos señalo:
“La realización del VI Congreso del Partido y de reuniones sistemáticas del Buró Político y el Comité Central para hacer realidad la dirección colectiva, cambios en la ley electoral que posibiliten una participación más efectiva de la población en la formación de las candidaturas a niveles superior del Poder Popular, la eliminación de la doble moneda y la unificación de todos los mercados, promulgación de una nueva Ley de Reforma Agraria que entregue en propiedad o usufructo la tierra ociosa a los campesinos, familias y cooperativas”
También“la desestatización de muchos servicios menores y su entrega a trabajadores cuentapropistas o cooperativas, mayor participación de los trabajadores en la gestión administrativa y técnica de las empresas tanto de producción como de servicios así como en las ganancias que generan, creación de cooperativas de transporte, cambios en la actual ley impositiva que bloquea la producción de alimentos; revalorización social y económica de los trabajadores de la medicina y la educación, libre acceso a la telefonía pública, celular e Internet, eliminación de las diferencias en los derechos de los trabajadores según el lugar donde trabajen, que los sindicatos asuman su papel como defensor de los trabajadores y no como simples transmisores de orientaciones del poder central, revisión de la ley de pensiones, creación de cooperativas de constructores de viviendas y mantenimiento y construcción de calles y caminos, entrega del control presupuestario a los Municipios del Poder Popular y otras muchas de este corte.”
Esta apreciación es totalmente confirmada por testimonios de los participantes,las críticasen el Diario Juventud Rebelde,en las plenarias de la UNEAC y hasta en nuestra tímida TV.
Para nuestra alegría, todas estas propuestas apoyan nuestros valores revolucionarios, al fortalecimiento de la dirección del Partido Comunista en la sociedad, y relegitiman nuestro proyecto social. Se ha dicho que hubo dos millones de compañeros que hicieron propuestas. No conocemos elementos que permitan valorar su cuantía, pero cualitativamente, sin dudas, son las soluciones que necesitamos.

¿Se están defendiendo ideales y propuestas realmente imposibles para la época? No lo creemos. Todo esto puede comenzar a aplicarse o experimentarse y nada de esto lesiona el socialismo, lo hace realidad. Para parte significativa de las propuestas no hacen faltan recursos materiales que no tengamos ya a nuestra disposición y para otras, ninguno.

Leonardo Padura, notable escritor cubano ,expuso recientemente: “En un país donde, por décadas, no se ha encontrado solución a los problemas de la vivienda y los abastecimientos, donde se reconoce por sus dirigentes que el interés por el trabajo ha decaído en la medida en que los salarios son insuficientes para la satisfacción de las necesidades cotidianas de la familia, en el que las formas de producción en sectores como la agricultura han hecho patente su ineficiencia, en el que la circulación de dos monedas –pesos cubanos y divisas- ha generado diferencias de posibilidades en la población con o sin acceso a los llamados "pesos convertibles", y en el que se están observando hace años deterioros éticos y manifestaciones ascendentes de indisciplina social ,… ya resulta indispensable introducir cambios "estructurales y conceptuales".

¿Cómo responderá Raúl Castro a todo esto? ¿Cuánto realmente cambiará? Se pregunta la revista británica The Economist, en un editorial de fines de octubre en típico cuestionamiento de los medios occidentales ante el desafío, mientras trata también de hacer influencia acerca de la necesidad de la “propiedad privada”. Nada que ver, dirían nuestros jóvenes.
La respuesta es obvia: fue Raúl quien primero solicitó disposición a realizar también cambios estructurales y de conceptos.
El pueblo habló, le toca ahora a la dirección del Partido y al gobierno. No existe ninguna prioridad mayor en Cuba, que salvar el Socialismo, si ello es así, entonces tenemos que asumir el riesgo de actuar, antes de que sea demasiado tarde. Y ya estamos demorados.
Viva la Revolución Cubana
Viva el Socialismo.
Carlos C. Díaz, es Ingeniero Eléctrico.

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