Venezuela
y Brasil tienen acuerdos con la dictadura para recibir profesionales,
que atienden en áreas rurales. Una doctora pidió asilo al gobierno de
Dilma tras comprobar que de los R$10.000 prometidos sólo recibe R$900.
La dictadura de los hermanos Castro siempre descubre “negocios” para
obtener dólares que financien la paupérrima economía de la isla. El
programa “Más Médicos” es uno de ellos. Este proyecto consiste en
acuerdos en los que el gobierno cubano se compromete a enviar médicos
que cubran la atención básica de áreas rurales.
Hugo Chávez fue el “primer cliente” de este sistema y, en agosto de
2013, la presidente de Brasil, Dilma Rousseff, anunció la firma del
convenio con los Castro para recibir doctores cubanos.
La médica cubana Ramona Matos Rodríguez se presentó ante el Congreso
de Brasil y solicitó asilo para no volver a la isla. La decisión se
fundamenta en el incumplimiento de las condiciones que el programa
presenta para los candidatos que se inscriben en Cuba.
La doctora Matos Rodríguez explicó que cuando se anotó en el
programa, el gobierno de los Castro le prometió una paga de u$s1000 al
mes, que se concreta con u$s400 en el lugar de trabajo, en este caso
Brasil, y los u$s600 restantes quedan en Cuba y se podrán usar cuando el
médico regrese a la isla.
La profesional explicó que el gobierno brasileño tiene un compromiso
de pago de R$10.000 mensuales (unos u$s4.000) por cada médico cubano que
trabaja en el país. Ese monto se le paga a la dictadura, pero el
profesional sólo recibe R$900 al mes.
En declaraciones a Martinoticias.com, la especialista en
Medicina Integral destacó que los médicos de otros países “cobran
R$10.000, hay otros que cobran R$15.000, dependiendo del lugar donde
estén”.
La doctora Matos Rodríguez fue recibida por diputados del Partido
Demócrata (DEM) en el Congreso, y en rueda de prensa aseguró que
presentará una solicitud de asilo para no tener que regresar a su país y
permanecer en Brasil.
“Me sentí engañada, muy mal. Me quedé pensando cómo hacer para salir
del programa”, declaró la médica de 51 años, tras denunciar que recibe
apenas un 10% de lo que el gobierno castrista le cobra a la
Administración de Dilma Rousseff.
Más de 7.000 médicos cubanos están anotados en el plan que los Castro
implementaron como una manera de “exportar” el talento, pero siempre
bajo la administración central y, según se desprende de las denuncias,
con muy poco beneficio para los profesionales y con grandes resultados
para el Gobierno.
La médica teme por su familia que permanece en Cuba, pero ha
ratificado se refugiará en el Congreso brasileño hasta que su solicitud
de asilo sea aprobada. El ministro de Justicia, José Eduardo Cardozo, le
advirtió que al salirse de la delegación, perderá su visa de
permanencia en Brasil, si bien puede prolongar su estadía como turista.
La renuncia formal al programa cubano todavía no fue presentada, según
la agencia de noticias AP.
El programa “Más Médicos” aspira a llevar, hasta marzo, a 13.000
profesionales a atender brasileños en áreas que carecen de servicio de
salud. La mayor parte de los galenos participantes del plan son cubanos,
algo que fue resistido por los profesionales brasileños. Aun así, en
términos generales, la delegación fue recibida positivamente en la
mayoría de la población. Dirigentes del DEM criticaron, sin embargo, que
se trata de una acción de propaganda del Gobierno, que no resuelve los
problemas de salud de Brasil.
No hay comentarios:
Publicar un comentario