Cuba perderá las preferencias arancelarias en la Unión Europea (UE) el próximo 1 de enero, meses antes de que pueda lograr un acuerdo global con el bloque, informaron este miércoles funcionarios de ambas partes.
"Es una pérdida automática por las estadísticas cubanas de acceder al nivel de renta media alta", dijo a la prensa el embajador de la UE en La Habana, Herman Portocarrero, "no tiene que ver nada con las relaciones bilaterales", agregó.
El embajador habló en un seminario ofrecido por la UE a empresarios y funcionarios cubanos, en el marco de la 31 Feria Internacional de La Habana, para explicar las exigencias y características del comercio con los 28 países miembros del bloque.
"La mala noticia para Cuba" es que pierde las preferencias que tenía en el Sistema de Preferencias Generalizadas (SPG), que beneficiaba al 38,9% de sus exportaciones y a partir del 1 de enero de 2014 debe acogerse al tratamiento de Nación más Favorecida (NMF), lo que eleva los aranceles, explicó Erja Askola, consejera de la Dirección de Comercio de la Comisión Europea.
Askola dijo que las exportaciones cubanas más afectadas son el níquel, el tabaco, ciertos productos agrícolas y de la pesca.
Las principales exportaciones de bienes de la isla son el níquel, los medicamentos y productos biotecnológicos, el tabaco, el azúcar, y los productos del mar.
El tabaco, pasará de un arancel de 17 a 25%, mientras el níquel, libre de arancel hasta ahora, pagará 2,4%.
El continente europeo es la segunda región en importancia comercial para Cuba, después de América Latina. Su comercio transatlántico en 2011 alcanzó 4.061 millones de dólares, según las cifras oficiales más recientes, de los cuales el 90% corresponde a las naciones que integran la UE.
De enero a agosto del presente año, ese comercio creció 8%, a partir de un aumento de 20% de las importaciones de Cuba desde los 28 y una caída de 12% en las exportaciones, dijo el secretario de la Cámara de Comercio de Cuba, Omar Fernández.
"Son problemas que tenemos que resolver y estamos en esa vía", dijo Pedro San Jorge, director para Europa del Ministerio de Comercio Exterior de Cuba.
San Jorge señaló que también representa un serio problema para Cuba "las regulaciones técnicas" que impone la UE para el comercio, en cuanto a calidad, composición y características de los productos a importar.
"Nos tienen (la UE) que dar todavía un tiempo para satisfacer esas exigencias", señaló.
Recordó que la Organización Mundial de Comercio (OMC) prevé un "tratamiento preferencial" para países en desarrollo y "eso es algo que tenemos que revisar", dijo.
El embajador Portocarrero señaló que es una "coincidencia" la pérdida de las preferencias con la negociación de un acuerdo global político, comercial y de cooperación, en el cual trabajan ambas partes.
Indicó que están por terminar "las directivas de negociación" que deben ser sometidas al Consejo de Asuntos Exteriores (de la UE) en diciembre, para comenzar las negociaciones con Cuba el próximo año, tal vez en febrero o marzo.
"El período de negociación puede ser más o menos largo, depende el grado de dificultad", estimó.
En cuanto a la parte política, recordó que "no siempre estamos de acuerdo en todo, hay diferencias importantes en algunos sectores".
"Pero la parte cubana aceptó en principio que todo podía estar encima de la mesa", incluyendo derechos humanos, papel de la sociedad civil y otras cuestiones, dijo.
El embajador habló en un seminario ofrecido por la UE a empresarios y funcionarios cubanos, en el marco de la 31 Feria Internacional de La Habana, para explicar las exigencias y características del comercio con los 28 países miembros del bloque.
"La mala noticia para Cuba" es que pierde las preferencias que tenía en el Sistema de Preferencias Generalizadas (SPG), que beneficiaba al 38,9% de sus exportaciones y a partir del 1 de enero de 2014 debe acogerse al tratamiento de Nación más Favorecida (NMF), lo que eleva los aranceles, explicó Erja Askola, consejera de la Dirección de Comercio de la Comisión Europea.
Askola dijo que las exportaciones cubanas más afectadas son el níquel, el tabaco, ciertos productos agrícolas y de la pesca.
Las principales exportaciones de bienes de la isla son el níquel, los medicamentos y productos biotecnológicos, el tabaco, el azúcar, y los productos del mar.
El tabaco, pasará de un arancel de 17 a 25%, mientras el níquel, libre de arancel hasta ahora, pagará 2,4%.
El continente europeo es la segunda región en importancia comercial para Cuba, después de América Latina. Su comercio transatlántico en 2011 alcanzó 4.061 millones de dólares, según las cifras oficiales más recientes, de los cuales el 90% corresponde a las naciones que integran la UE.
De enero a agosto del presente año, ese comercio creció 8%, a partir de un aumento de 20% de las importaciones de Cuba desde los 28 y una caída de 12% en las exportaciones, dijo el secretario de la Cámara de Comercio de Cuba, Omar Fernández.
"Son problemas que tenemos que resolver y estamos en esa vía", dijo Pedro San Jorge, director para Europa del Ministerio de Comercio Exterior de Cuba.
San Jorge señaló que también representa un serio problema para Cuba "las regulaciones técnicas" que impone la UE para el comercio, en cuanto a calidad, composición y características de los productos a importar.
"Nos tienen (la UE) que dar todavía un tiempo para satisfacer esas exigencias", señaló.
Recordó que la Organización Mundial de Comercio (OMC) prevé un "tratamiento preferencial" para países en desarrollo y "eso es algo que tenemos que revisar", dijo.
El embajador Portocarrero señaló que es una "coincidencia" la pérdida de las preferencias con la negociación de un acuerdo global político, comercial y de cooperación, en el cual trabajan ambas partes.
Indicó que están por terminar "las directivas de negociación" que deben ser sometidas al Consejo de Asuntos Exteriores (de la UE) en diciembre, para comenzar las negociaciones con Cuba el próximo año, tal vez en febrero o marzo.
"El período de negociación puede ser más o menos largo, depende el grado de dificultad", estimó.
En cuanto a la parte política, recordó que "no siempre estamos de acuerdo en todo, hay diferencias importantes en algunos sectores".
"Pero la parte cubana aceptó en principio que todo podía estar encima de la mesa", incluyendo derechos humanos, papel de la sociedad civil y otras cuestiones, dijo.
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