Por Andrés Pascual
A pesar de la parcialidad viciosa demostrada por el Califa, incluso por la jueza, George Zimmerman fue declarado “no culpable”.
El proceso, que fue llevado de la mano por el poder antiamericano tras bambalinas con intenciones homicidas de todo lo decente en el país, pareció que se hundiría en el fango de los más bochornosos juicios de la historia americana.
El caso Simpson ERA UN PRECEDENTE AMENAZANTE: fallar a favor de los negros por miedo o por quién sabe qué es “lo políticamente correcto”, aquella vez ningún negro protestó y dos familias blancas nunca recibieron la justicia que las pérdidas requerían.
Un presidente blanco liberal, pusilánime, decadente y corrupto, demócrata y antiamericano con otra corte de elementos peligrosos para la estabilidad de la nación, metió las manos en la mierda hasta los hombros.
Hoy “triunfó la justicia”, a pesar de que el poder judicial estaba contra el concepto.
En lo adelante habrá que prepararse para la revancha de la Administración, más peligrosa que la rabiosa explosión de los negros contra el veredicto.
Al modo mío de ver el asunto, suponía que una declaración de culpabilidad debía tener como respuesta un llamamiento a todos los blancos cuyos hijos o familiares han sido asesinados por negros, para que se dieran una vueltecita por la ex Casa Blanca a ver qué les podía recetar el presidente como consuelo.
No hubo necesidad de concentrar en Washington tal vez a 40 ó 50 millones de personas.
Por lo que cada día se veía, ante cada prueba derrotada, con cada declaración testifical depuesta, el individuo se alejaba más del cargo de culpabilidad por el asesinato.
Si Zimmerman hubiera sido culpable, si me hubiera podido convencer el gobierno liberal de que el vigilante había asesinado intencionalmente al joven Martin, todos los materiales que he escrito nunca hubieran visto la luz, sino uno, con título grande y despliegue amenazante: ¡MATEN A ESE ASESINO O...! Y NO SIMPATIZO NI CON LA ADMINISTRACIÓN NI CON ESTE APARATO JUDICIAL NI CON LAS ORGANIZACIONES QUE AGRUPAN Y MUEVEN AL NEGRO REVANCHISTA, por supuesto, tampoco con la enorme cantidad de negros criminales que tienen al país en jaque, la mayoría de entre 12-20 años de edad..
No les salió como lo prepararon, por lo que una parte del país va a dormir sin complejos de culpabilidad y medio mundo creyendo que la justicia americana es funcional; la otra, movida por el comunismo internacional y el poder antiamericano doméstico, haciendo su campaña sucia basada en que, todavía, los blancos son “el coco de los negros”, sin prestarle atención al instinto criminal de esta gente, que reflejan diariamente los noticieros del país.
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