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martinoticias
Holanda, último campeón en la Copa del Mundo de la Asociación Internacional de Béisbol (IBAF), extendió su dominio sobre Cuba, esta vez con marcador de seis carreras por dos, en el primer partido de la segunda ronda del III Clásico Mundial, organizado por las Grandes Ligas estadounidenses.
Fue en el Tokyo Dome, de la capital japonesa, donde los tulipanes tomaron ventaja de 2-0 ante el abridor Ismel Jiménez, víctima de un jonrón del inicialista Curt Smith. Los antillanos ripostaron con bambinazo de Alfredo Despaigne, para acercarse en la pizarra, pero el zurdo Diegomar Markwell no permitiría más libertades a los dirigidos por Victor Mesa.
Holanda agregó tres anotaciones, a la postre decisivas, en el sexto episodio, por cuadrangular del segunda base Jonathan Schoop ante el recién llegado relevista Yadier Pedroso, cuando había dos corredores en los senderos.
Los antillanos llegaron a la goma por última vez en el séptimo episodio, por batazo de vuelta completa de Yulieski Gourriel ante el relevista Leon Boyd. A seguidas, el equipo ganador fabricó la última rayita, con sencillo del torpedero Andrelton Simmons y doble de Schoop.
Loek Van Mil, un diestro enviado a la lomita en el noveno, retiró fácilmente a Alfredo Despaigne, a Gourriel y al emergente Yosvany Peraza.
Holanda pegó 14 imparables; Cuba sumó 12 y cometió dos errores al campo. Fueron al box por Cuba en la fatídica jornada, después de Ismel Jiménez, Freddy Asiel Álvarez, Pedroso, Yander Guevara, Norberto González, Raciel Iglesias y Diosdanys Castillo.
Ahora los criollos esperan como oponente al equipo que resulte perdedor del partido Japón-Taipei de China, para entonces llevar al terreno un duelo de vida o muerte, en esta segunda etapa del III Clásico.
Cuba sufrió derrotas igualmente costosas frente a la selección holandesa durante la Copa del Mundo que se celebró en 2011 en Panamá. El primer revés, cuatro carreras por una, obligó al plantel cubano a vencer a Canadá para pasar a la final, donde volvió a perder en un partido más cerrado, 2 x 1, frente a los anaranjados, que ganaron la Copa por primera vez.
Fue en el Tokyo Dome, de la capital japonesa, donde los tulipanes tomaron ventaja de 2-0 ante el abridor Ismel Jiménez, víctima de un jonrón del inicialista Curt Smith. Los antillanos ripostaron con bambinazo de Alfredo Despaigne, para acercarse en la pizarra, pero el zurdo Diegomar Markwell no permitiría más libertades a los dirigidos por Victor Mesa.
Holanda agregó tres anotaciones, a la postre decisivas, en el sexto episodio, por cuadrangular del segunda base Jonathan Schoop ante el recién llegado relevista Yadier Pedroso, cuando había dos corredores en los senderos.
Los antillanos llegaron a la goma por última vez en el séptimo episodio, por batazo de vuelta completa de Yulieski Gourriel ante el relevista Leon Boyd. A seguidas, el equipo ganador fabricó la última rayita, con sencillo del torpedero Andrelton Simmons y doble de Schoop.
Loek Van Mil, un diestro enviado a la lomita en el noveno, retiró fácilmente a Alfredo Despaigne, a Gourriel y al emergente Yosvany Peraza.
Holanda pegó 14 imparables; Cuba sumó 12 y cometió dos errores al campo. Fueron al box por Cuba en la fatídica jornada, después de Ismel Jiménez, Freddy Asiel Álvarez, Pedroso, Yander Guevara, Norberto González, Raciel Iglesias y Diosdanys Castillo.
Ahora los criollos esperan como oponente al equipo que resulte perdedor del partido Japón-Taipei de China, para entonces llevar al terreno un duelo de vida o muerte, en esta segunda etapa del III Clásico.
Cuba sufrió derrotas igualmente costosas frente a la selección holandesa durante la Copa del Mundo que se celebró en 2011 en Panamá. El primer revés, cuatro carreras por una, obligó al plantel cubano a vencer a Canadá para pasar a la final, donde volvió a perder en un partido más cerrado, 2 x 1, frente a los anaranjados, que ganaron la Copa por primera vez.
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