tema inevitable y necesariamente polemico que tiene multiples lecturas. el impacto en la sociedad cubana de un contreras con un anillo de
campeon de la serie mundial y 67 millones de ganacias netas es
descomunal. una visita a la habana del duque y livan hernandez
abarratoria el estadio latinoamericano y activaria el puesto de mando
contra insurgencias.
de nada ha servido la maquinaria de propaganda desplegada durante 54 anos, la troquelacion de las "nuevas generaciones" si un humilde deportista tiene mas poder de convocatoria que todos los politicos castristas y anticastristas juntos. y es que como comentaba un asesor de gorbachov el "comunismo" esta en contra de la naturalea humana. todo el mundo quiere ser un contreras y un duque en cualquier cosa o al menos tener el derecho a aspirar a serlo.
al final la democracia no se define desde el castrismo ni el anticastrismo, sino que tiene senderos universales e independientes. cada uno esta luego en el derecho de estimar y hacer lo que considere.
--------------------------- de nada ha servido la maquinaria de propaganda desplegada durante 54 anos, la troquelacion de las "nuevas generaciones" si un humilde deportista tiene mas poder de convocatoria que todos los politicos castristas y anticastristas juntos. y es que como comentaba un asesor de gorbachov el "comunismo" esta en contra de la naturalea humana. todo el mundo quiere ser un contreras y un duque en cualquier cosa o al menos tener el derecho a aspirar a serlo.
al final la democracia no se define desde el castrismo ni el anticastrismo, sino que tiene senderos universales e independientes. cada uno esta luego en el derecho de estimar y hacer lo que considere.
Andrés Pascual
Yo cumplo básicamente con el principio que reza “por al Alma Máter, hasta la vida es poco…”, esa es la razón por la que el 70 % de lo escribo sobre cualquier tema, deportes, farándula… tiene invariablemente un toque político relativo a mi patria, de defensa de mi país, que cumplió el mes pasado 54 años de brutal explotación tiránico-dictatorial por los peores criminales de la historia: los comunistas.
Como que la plana, el radio a veces y, hasta la televisión otras, son mis modestas armas de combate en la casi imposible recuperación de la vergüenza y la dignidad necesarias para la liberación de un país que valía más que todos los izquierdistas, liberales, socialista y comunistas del mundo juntos, no puedo sacrificarlas porque apáticos de cualquier lugar, o simpatizantes con la barbarie de todos lados, quieran.
Yo sé cómo escribir o hablar de la Serie del Caribe en carácter puramente deportivo, sin embargo, no puedo sobreponerme a la rabia de aceptar en silencio consentidor que mi país no está ahí por obra y gracia de un desalmado asesino que, como mejor le hubiera resultado a Cuba, era muerto al nacer.
Me interesa mucho qué pudieran hacer el campeón mexicano o el dominicano, incluso quién gane en Hermosillo, pero más lo que no puede hacer una Cuba perdedora, porque no tuvo la ayuda que representa lo cubano anti castro-comunista como relator crítico de un desastre anunciado para quien no sea inteligente o no le preocupe cómo pudiera ser el futuro de su país si, por apatía o por falso y fatal “puritanismo de tema”, la lacra socio-política castro-comunista los invadiera por intermedio de nacionales tan ladrones, indignos y criminales como quienes se engulleron a la tierra que vio nacer a Orestes Miñoso.
José Ariel Contreras regresó de una visita de 15 días a Cuba de indudable intención humanitaria, porque a su madre le amputaron una pierna, sin embargo, el propio pitcher se encargó de “mezclar lo político con lo deportivo” al tratar de impresionar a los acólitos castristas con su actitud “pro Cuba”, de agradecimiento a la tiranía y con otros comentarios que, o es muy imbécil o muy militante de la ideología que sojuzga y mata a su pueblo.
En el caso de este individuo, como en el de la mayoría de los recientes “cuentapropistas” del beisbol, la conversión a entrante económico se cumple al 100 % sin ninguna relación con el rechazo a la tiranía. Por lo general, sus declaraciones al llegar a Estados Unidos son “quería probarme en la grande” o “buscaba un techo más alto”, que se cumplen por el contubernio del Beisbol Organizado con la dictadura “por debajo del tapete”, con México como terreno neutral de conversaciones sobre estas y otras cosas por venir en breve.
Contreras “¿se les escapó?”, precisamente, en la patria de Chile Gómez; ya estaba fichado por los Yankees, curiosamente, el club del tirano mayor, que mantiene como su ídolo no a Muñoz ni al propio Contreras, sino al Clipper de la franela rayada, a quien le solicitó una pelota firmada hace varios años y el ítalo-americano no halló algo peor que enviársela.
Sospechosamente, la gerencia del club de Babe Ruth fue multada por “violación del embargo” a los Castro, en relación con la firma del pinareño y de otros procedentes de la ex Isla bella como agentes libres.
Luego de apoyar tácitamente a la tiranía con cada palabra que ha dicho desde que llegó, la disyuntiva entre considerarlo estúpido o militante (siempre he creído las dos cosas) se presenta cuando dijo “nunca jugaré contra mi equipo, nunca lanzaré contra Cuba…”, es decir, el tipo pretende confundir a ¿Quiénes? Cuando considera a la caricatura de team propiedad del tirano, como la representación de mi patria (la mía), no la de él. Estas sabandijas no pueden ser mis compatriotas porque no cumplen el mínimo requisito para poder considerarlos cubanos.
Por el lado bueno del asunto, sin complicarlo con acusaciones de comunista, incluso ni como representante difusor de esa horda (que lo es), si el tipango hubiera tenido en cuenta que no puede jugar en esa novenita a pesar de que “el pueblo” lo recibió como a un héroe (foto ilustrativa), se hubiera callado antes de hacer semejante ridículo.
No se puede considerar como “su equipo” al que, para integrarlo, no es suficiente ser buen pelotero, incluso ni rechazado por la población, todo lo contrario.
¡Ah, pero el tirano lo llamó “el Titán de Bronce”! y ha tenido la poca vergüenza de aceptar el glorioso sobrenombre y permitir que otros lo llamen así, entonces es fácil entender la razón por la que cree que el equipo de Castro a eventos internacionales es su equipo.
Pestano, cátcher; Kindelán, 1b; Pacheco, 2da; Linares, 3era; Mesa, ss; Gourriell, rf; Víctor Mesa, cf; Casanova, lf y Pedro Luis Lazo como pitcher es la novena más fuerte de “todos los tiempos” en cualquier pelota; incluso “Alex Rodríguez… pero Linares era otra cosa…” o “el mejor short stop de todos los tiempos es Germán…” o “no ha habido un pitcher como Lazo en la historia” y que conste que no se refiere a Cuba, sino al mundo.
El ridículo continuado de estos embajadores de la tiranía es tal que retomó la frase de Camilo Pascual “donde yo disfrutaba pitchear era en el Cerro” y la moldeó para meterla a la fuerza en los equipos de Pinar del Río o en el del sátrapa, no nacional, sino personal.
Sin embargo, ¿Cuántos están comentando como se debe estas declaraciones infames y provocadoras? ¿Cuántos están haciéndole las preguntas que hace falta que responda desde su estupidez supina y su condición de reptil absoluto, aunque sea explicar por qué Gourriell es mejor que Babe Ruth o Pestano que Bench? Muy pocos eh, pero no voy a ser uno de esos, que se plegue a la conducta impropia con el silencio cómplice o con la reafirmación militante de esa sarta de basura y mentiras. En mi caso, como digo siempre, lea a otro, pero tenga cuidado, “porque el Diablo anda suelto y pasan cosas…”
Le sugiero a quienes no son cubanos que le presten atención a estos detalles, que son viejos y reveladores: a pesar de la Reforma de Obama, condiciones como las del Ajuste Cubano son poco posibles para otros pueblos, así que cuiden lo que tienen y mezclen un poco lo político con lo deportivo, porque el tiempo se les acaba, digo, si les importa su patria, si no, “sigan al farolero”.
Con esa conducta Contreras le hace una petición a la tiranía, posiblemente a nombre de todos los que están aquí, para que les permitan jugar “por su team”, contra el que “nunca jugaría”, yo no dudo que lo llamen para este próximo “clásico” y haría falta, para que le den la mano de palos combinada con el saco de bolas que receta y acostumbra, desde su poca estatura de cobarde absoluto, lo mismo en el juego que en el box.
Por eso Liván es uno de los mejores pitchers cubanos de todos los tiempos, no solo por su extraordinario total de más de 175 ganados en Grandes Ligas, si no porque siempre ha querido salir “a sacarle un ojo al equipo del tirano y… de Contreras”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario