España ordena 'cancelar' los actos con la disidencia cubana

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Para 'rebajar la tensión' con La Habana, el Gobierno de Rajoy también suspenderá cualquier moción prodemocracia en Cuba ante el Parlamento Europeo.
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El Gobierno de España quiere "rebajar la tensión" y mantener ahora una relación más tranquila con La Habana, después de las negociaciones para repatriar al político Ángel Carromero, detenido en la Isla tras el supuesto accidente que le costó la vida a Oswaldo Payá y Harold Cepero.

Según informa este lunes El Confidencial Digital, el Ministerio de Exteriores de España "ha dado orden de medir las intervenciones públicas" con respecto al régimen de Castro.

El ministerio que dirige José Manuel García-Margallo se ha marcado como "prioridad", después de meses de conversaciones entre Madrid y La Habana, "mantener la mejor sintonía" que se ha conseguido y para ello "ha dado orden de tener una postura más serena" respecto a la Isla.

En concreto, ha trasladado a los portavoces del Ejecutivo, a los dirigentes del Partido Popular (PP) y a las delegaciones españolas en Bruselas y Estrasburgo que "dejen aparcadas las reivindicaciones históricas que se han mantenido para el fin de la dictadura en Cuba, ya que eso supondría volver a estar en tensión con el régimen castrista".

Según el diario digital madrileño, que suele estar bien informado, "han quedado canceladas las peticiones de mayor democracia en Cuba que estaban previstas presentar, a modo de moción, en el Parlamento Europeo, así como actos a corto plazo con representantes de la disidencia cubana".

Las fuentes consultadas por el diario explican que la visita de Esperanza Aguirre a Ángel Carromero, y sus declaraciones posteriores atacando al régimen de La Habana, "son un ejemplo de lo que no quiere ahora [el Ministerio de] Exteriores".

En ese departamento reconocen que las gestiones realizadas para la extradición del dirigente de Nuevas Generaciones del PP "no pueden caer en saco roto y volver a la tensión con la isla que existía anteriormente. La postura de España con respecto al régimen castrista es de sobra conocida y tampoco hay que ahondar más en la herida".

El diputado hispano-cubano Teófilo de Luis aclaró que "eso no significa un cambio, ni que el Gobierno español se haya desmotivado sobre el tema de los derechos humanos" en la Isla.

"Otra cosa es que el Gobierno español vaya a acoger la reclamación de determinados sectores que piden una investigación internacional" sobre la muerte de Payá y Cepero, dijo.

"Particularmente, yo tampoco voy a exigirla (la investigación). Soy un diputado del Congreso español y no del Capitolio de La Habana", afirmó De Luis en declaraciones a DIARIO DE CUBA.