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| Michael Comporto/ Foto: Anaya.José L. |
La Habana (6 jul).- Hasta el quinto episodio todo fue cero en la
pizarra del estadio Latinoamericano, donde cuadrangular con las bases
llenas de Michael Conforto signó el triunfo 4-3 de Estados Unidos sobre
Cuba en el primer desafío del tope beisbolero pactado hasta el lunes
próximo.
Designado y cuarto bate, Conforto botó una pelota Mizuno 200 por el jardín izquierdo que decidió el pleito en el sexto ante unos ocho mil asistentes, en jornada que la lluvia hizo por ser protagonista.
Con su único inatrapable de la noche, el visitante hizo trizas la teoría de zurdo contra zurdo, pues le cazó una recta al siniestro Norberto González que definió el choque iniciado a las nueve y media, tras ponderable labor de los especialistas en terreno del Coloso del Cerro.
Los cubanos recortaron en el séptimo inning con igualmente vuela cercas de dos carreras del designado Frederich Cepeda y fabricaron otra anotación en el octavo por cohetazo al central de Yulieski Gourriel, pero ahí quedó el intento ofensivo.
Con cinco indiscutibles para uno y otro conjunto concluyó el partido ganado por el abridor norteño Jonathon Crawford, de envíos de hasta 94 millas que hicieron estragos en los bateadores cubanos, especialmente en su “toletero” Alfredo Despaigne, quien se tomó par de ponches.
El mentor cubano Víctor Mesa empleó a cinco lanzadores en el cotejo que abrió el derrotado Yadier Pedroso.
Pedroso trabajó cinco entradas y un tercio, lapso en que toleró tres indiscutibles, par de carreras, todas limpias y ponchó a siete con par de bases por bolas concedidas.
“No hay justificación, se perdió porque “atacamos” menos que ellos”, significó Mesa al comparar la capacidad ofensiva de su armada con la de los visitantes.
Luis César Valdés comandó desde el home el equipo de árbitros sin contratiempos.
Este viernes esos elencos protagonizarán el segundo cotejo de cinco pactados hasta el lunes próximo.
Designado y cuarto bate, Conforto botó una pelota Mizuno 200 por el jardín izquierdo que decidió el pleito en el sexto ante unos ocho mil asistentes, en jornada que la lluvia hizo por ser protagonista.
Con su único inatrapable de la noche, el visitante hizo trizas la teoría de zurdo contra zurdo, pues le cazó una recta al siniestro Norberto González que definió el choque iniciado a las nueve y media, tras ponderable labor de los especialistas en terreno del Coloso del Cerro.
Los cubanos recortaron en el séptimo inning con igualmente vuela cercas de dos carreras del designado Frederich Cepeda y fabricaron otra anotación en el octavo por cohetazo al central de Yulieski Gourriel, pero ahí quedó el intento ofensivo.
Con cinco indiscutibles para uno y otro conjunto concluyó el partido ganado por el abridor norteño Jonathon Crawford, de envíos de hasta 94 millas que hicieron estragos en los bateadores cubanos, especialmente en su “toletero” Alfredo Despaigne, quien se tomó par de ponches.
El mentor cubano Víctor Mesa empleó a cinco lanzadores en el cotejo que abrió el derrotado Yadier Pedroso.
Pedroso trabajó cinco entradas y un tercio, lapso en que toleró tres indiscutibles, par de carreras, todas limpias y ponchó a siete con par de bases por bolas concedidas.
“No hay justificación, se perdió porque “atacamos” menos que ellos”, significó Mesa al comparar la capacidad ofensiva de su armada con la de los visitantes.
Luis César Valdés comandó desde el home el equipo de árbitros sin contratiempos.
Este viernes esos elencos protagonizarán el segundo cotejo de cinco pactados hasta el lunes próximo.
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