El 13 de diciembre se recibio un correo de Francisco Chaviano Gonzalez, el cual contenia graves acusaciones contra Rene Gomez Manzano Correo: "Necesidad de poner fín a la traición"/ Francisco Chaviano Gonzalez
Hoy se ha recibido la respuesta a las mismas de Gomez Manzano, la que reproducimos en su integridad, en la seguridad que lavar las sabanas y tenderlas en el balcon contribuye a la integridad y la moral de los opositores al regimen de La Habana y no los secretismos que siembran la desconfianza y contribuyen a los objetivos de la tirania .
Cada persona es libre de formarse sus propios juicios valorativos, pero sin dudas es una asignatura pendiente que tiene que resolver la disidencia interna si quiere liderear una real y efectiva oposicion al Castrismo reformado.
--------------------------------------------La Habana, 23 de diciembre de 2010
Estimados amigos:
En las últimas semanas ha constituido noticia el sitio WikiLeaks; pero ahora, por obra y gracia de la actuación del Sr. Francisco Chaviano González, no resulta desacertado hablar de ChaviLeaks.
Solo que en este caso la divulgación de los materiales comprometedores no proviene de un extranjero, de una persona a quien no le importa perjudicar un país que le es ajeno, sino de alguien que forma parte de la misma organización que ha resultado comprometida con su actuar (la Agenda para la Transición Cubana), de un opositor que no ha vacilado en publicar en internet documentos internos de esa organización ni en realizar ataques públicos virulentos contra otros opositores.
Me veo por esta razón en la penosa necesidad de dirigirles estas líneas, así como los ficheros acompañados, a fin de responder esas graves e infundadas imputaciones. Considero lamentable tener que hacerlo, pero el Sr. Chaviano, al divulgar sus voluminosos escritos entre todos sus contactos y pedirles que les den la máxima publicidad posible, no me ha dejado otra alternativa que contestarle, pues debo evitar que alguien me aplique el conocido refrán El que calla, otorga.
Por supuesto que rechazo por completo las acusaciones del Sr. Chaviano y responderé a aquellas que tienen alguna sustancia (no así a la serie de anécdotas y meros chismes que él menciona, y en los que no vale la pena perder el tiempo). Debo aclarar que en mi respuesta trataré de evitar los juicios de valor y las descalificaciones personales (como las que él sí ha hecho, y en abundancia). También obviaré términos peyorativos, tales como “traición”, “consiliábulo” (sic), “cofradía”, “conjura”, “terremoto” y otros igualmente truculentos que Chaviano ha usado en abundancia. Procuraré señalar solo hechos objetivos.
Ante la feroz arremetida actual de Chaviano, lo primero que hay que preguntarse es: ¿Por qué esto? Y sobre todo: ¿Por qué ahora? ¿Es una casualidad que esos ataques se hayan producido a raíz de que los otros miembros del Secretariado Pro Tempore de la Agenda rechazamos su pretensión de alzarse con una considerable suma de dinero de la organización? ¡Por supuesto que no!
Si Chaviano realizó ese ataque feroz (el cual incluyó hasta ofensas personales inadmisibles) y si lo hizo en este momento, fue justamente porque ahora surgió el problema del dinero. Todo lo demás que el ha mencionado en sus escritos es hojarasca, una cortina de humo para ocultar la verdadera razón de la virulencia de sus ataques e insultos personales.
Como Chaviano ha estado preso 14 años (cosa que se ha encargado de repetir en su papelerío), seguramente sabe que, en la jerga carcelaria cubana ese tipo de acción se conoce como “ir alante” (versión vulgar de “huir hacia delante”). Este modus operandi consiste en, ante un problema grave, provocar otro aparentemente desvinculado del primero, con el fin de que este quede enmascarado en lo posible.
Para no abrumar en demasía a los lectores que tengan tiempo y deseos de profundizar en algunos de los aspectos que planteo en este mensaje, adjunto a él varios ficheros, que tratan sobre los aspectos siguientes:
1. La explicación sucinta de en qué consiste el problema del dinero, eje de todo este asunto. (Este es el fichero número 1: Euros-CUCs.doc)
2. Los documentos fundamentales que versan sobre ese punto central y que demuestran que lo que pretende Chaviano es sencillamente hacer objeto a la Agenda de un vulgar despojo. (Estos ficheros son los marcados con los números del 2 al 8. Entre ellos merece una mención especial el número 2, titulado “De puño y letra de Chaviano”, que es el recibo escrito y firmado por él, así como por Félix Bonne y un servidor).
3. Una exposición sobre los problemas entre Chaviano y la Sra. Martha Bonachea Rojas. (Este fichero es el marcado con el número 9: Cherchez la femme!). Les significo que este asunto fue (hace meses) el punto de inicio del distanciamiento de Chaviano del resto del Secretariado Pro Tempore de la Agenda. Además, de ahí nace lo que ahora Chaviano describe como mi supuesta “traición” a la Agenda.
4. Mi respuesta a algunos otros temas planteados por Chaviano en sus extensos escritos. Reitero que se trata de las cuestiones de cierta importancia, pues las simples anécdotas sobre situaciones y discrepancias que son inevitables en cualquier asociación democrática, las he soslayado para no hacer perder el tiempo inútilmente a los lectores. (Este fichero es el número 10: Cosas que hay que aclarar.)
Preciso que si las versiones de los documentos que envío son completas (sin tachar ni omitir, por ejemplo, la cantidad sobre la que versa este diferendo: 1,750 €, que al cambio del momento equivalían, según afirma Chaviano, a 1.985 CUC) es sencillamente porque el propio Sr. Francisco Chaviano se ha encargado de publicar esos datos internos públicamente, circulándolos con amplitud por toda la red mundial.
Desde ahora deseo aclarar que no pienso enzarzarme en un debate con el Sr. Chaviano. Solo si apareciera algún nuevo documento probatorio, me limitaría a enviarlo para conocimiento de ustedes. Este es el último mensaje que pienso emitir sobre esta cuestión. Esa misma será la opinión que llevaré a cualquier reunión futura del Secretariado Pro Tempore de la Agenda que trate este asunto. Si este órgano decidiera colectivamente otra cosa, así se informará a la opinión pública.
Les presento mis disculpas por tener que enviarles este mensaje, pero espero que comprendan que no me quedaba otra opción.
Atentamente,
René Gómez Manzano
ANEXOS AL CORREO DE GOMEZ MANZANO
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